Familia y seguridad

La Ley de Refugio Seguro de Illinois brinda a los padres una forma segura de entregar a un bebé recién nacido para adopción si sienten que no pueden manejar la responsabilidad. Los padres tienen 60 días a partir de la fecha de entrega de su bebé para reclamar a su bebé presentando una petición ante la Corte de Circuito. Puede dejar a su bebé recién nacido con los trabajadores en un lugar seguro sin hacer preguntas si:

• El bebé no ha sufrido ningún daño, y
• El bebé tiene menos de 30 días de edad.

 Los lugares seguros son:

• Hospitales
• Centros de atención de urgencia
• Estaciones de policía
• Estaciones de bomberos (con personal)

Niños mayores

En el caso de los niños mayores, no se puede utilizar la Ley de Refugio Seguro. La Ley de Refugio Seguro solo se aplica a los bebés de 30 días o menos. Para entregar a los niños mayores, el padre (o los padres) deben seguir el proceso de adopción, que es un proceso más formal y detallado. 

Padre con una enfermedad terminal

Un padre con una enfermedad terminal puede dar su consentimiento a algo llamado adopción.  Una adopción en reserva ocurre cuando un padre o madre conforme a la ley da su consentimiento para que una persona específica adopte a su hijo en un momento futuro. Entra en vigor cuando el progenitor consentido del menor fallece o ese progenitor solicita que se dicte el fallo definitivo de adopción. 

Adopción vs. Ley de Refugio Seguro

Una adopción es un proceso formal que se puede llevar a cabo con la ayuda de una agencia pública o de manera privada. Dependiendo de la edad del niño, es posible que el niño deba estar de acuerdo con la adopción en ciertas situaciones de adopción. Debe seguir un proceso formal en la corte para terminar sus responsabilidades parentales. Por lo general, los padres legales del niño deben 1) estar de acuerdo con una adopción en la corte o frente a un juez o trabajador social y 2) firmar un documento llamado Consentimiento Final e Irrevocable para la Adopción, que pone fin a las responsabilidades parentales.

La Ley de Refugio Seguro, por otro lado, se aplica a situaciones muy específicas, y el proceso de entrega de un niño en virtud de esta ley es generalmente anónimo siempre que no haya signos de que el niño haya sido abusado o descuidado por el padre. Los padres pueden entregar a su bebé a los empleados en un lugar seguro designado y no se les pedirá que proporcionen ninguna información personal. Los padres pueden completar opcionalmente la información del historial médico del bebé o enviarla por correo más tarde. 

Cuando un padre entrega a un niño en virtud de la Ley de Refugio Seguro, se presume que el padre acepta renunciar a sus derechos parentales sobre el niño.